EN DOCTOR ARROYO: MUCHO BAILE Y FERIA PERO... SIN SALUD, SEGURIDAD Y CON PESIMA INFRAESTRUCTURA PÚBLICA
Por fin y gracias a dios han terminado los “eventos
tradicionales” del municipio. Una vez más, la presidencia municipal, en
complicidad con el deshonorable cabildo, ha despilfarrado grandes sumas de
dinero en grupos musicales de tercera categoría y juegos mecánicos más oxidados
que los carros en el corralón. Todo esto, para inflar cifras en las hojas de
transparencia.
El municipio sigue gastando millones en bailes, ferias y
eventos para la “prole”, mientras las calles parecen zonas de guerra, el
hospital está al borde del colapso, y el camión de bomberos no tiene ni agua.
Al parecer en este municipio, en lugar de invertir en infraestructura, salud o
seguridad, el dinero se queda en las manos de los organizadores de estas
fiestas, quienes, casualmente, siempre salen con los bolsillos llenos.
Lo más preocupante es que las ferias, en teoría, deberían
generar ingresos para el municipio. Pero aquí ocurre lo contrario: la
presidencia gasta como si no hubiera mañana, mientras el pueblo se hunde en
problemas. El hospital sigue abandonado, las calles parecen cráteres lunares y
los servicios básicos brillan por su ausencia.
Si tan solo ese dinero se usara para atender las verdaderas
necesidades del municipio, otro gallo cantaría. Pero no: el gobierno local
prefiere seguir órdenes de “ya saben quién” y gastar millones en “cultura” y
festividades que solo benefician a unos pocos.
De los ejidos mejor ni hablamos porque si bien les va, les
mandan un grupo musical que factura directamente en la presidencia y les
autorizan una cabalgata donde no más el comisario lleva caballo y los demás en
burro. Mientras tanto, San Cayetano de Vacas (curiosamente) tiene presupuesto
para todo y para lo que necesiten. Raro ¿no?
Bien dicen que a la prole para que no se te ponga al brinco
la mantienes feliz con pan y circo. El problema es que esos mismos paleros que
aplauden cualquier cosa, son los primeros en quejarse cuando las cosas están
mal. ¡Pero qué importa! Todo se resuelve con un pretexto barato, suficiente
para engañar a quien no terminó la secundaria.
Por cierto, a los que justifican este gasto diciendo que es
para la "virgencita", les recordamos algo: el dinero público no debe
usarse en actividades religiosas. Existe algo llamado separación
Iglesia-Estado. Si quieren fiestas religiosas, que las hagan, pero sin usar el
presupuesto del pueblo como excusa para el saqueo.
Mientras tanto aquí en Doctor Arroyo por estos tres años,
seguirá habiendo dinero para bailes, pero para lo demás no. Disfruten lo
votado.
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